El mismo 25 de mayo de 1810, el Cabildo dio a la Junta un Reglamento de once artículos. Este Reglamento reiteraba el carácter "provisional" de la Junta, insistía en la soberanía de Fernando VII y convocaba a los diputados del interior para reunirse en Congreso y establecer la forma de gobierno que se considere más conveniente.Por el artículo 5 del Reglamento, el Cabildo se reservaba el derecho de "proceder a la deposición" de la Junta.Pero ésta no se quedó atrás y el 26 exigió a la Real Audiencia, al Obispo y al Cabildo Eclesiástico, funcionarios públicos, jefes militares y el Cabildo le juraran obediencia.
Los miembros de la Junta redactaron el 28 de mayo su propio Reglamento administrativo para el ejercicio de la autoridad.Contaba con diez artículos referidos a horarios de trabajo, distribución de tareas en un Departamento de Hacienda y otro de Gobierno y Guerra, protocolo en la firma de decretos, derechos de Patronato y en los honores a los integrantes del Gobierno ProvisionalEn su artículo 10°, el Reglamento establecía que: "todo vecino podía dirigirse de palabra o por escrito a cualquiera de los vocales de la Junta misma y comunicar cuanto crea conveniente a la seguridad jurídica y felicidad del Estado".
Durante los siete meses que duró su gestión (25 de mayo - 18 de diciembre), la Junta Provisional trató de afianzarse pese a las dificultades que se le presentaron con la Real Audiencia, el Cabildo, la resistencia de Córdoba y los preparativos bélicos del virrey del Perú, Fernando de Abascal.
La Junta envió a las autoridades del interior una Circular el día 27 de mayo para informarles acerca de la situación en Buenos Aires y pedirles que enviaran representantes que se irían incorporando a la Junta a medida que llegaran a la capital.
Para asegurar el triunfo de la revolución la Junta envió expediciones militares a Córdoba, al Alto Perú, al Paraguay y a la Banda Oriental.
Entre las medidas de gobierno de carácter social que realizó el primer gobierno patrio merece destacarse la concesión de derechos políticos a los aborígenes y la elaboración de normas para facilitar la venta de terrenos a los agricultores.
En el aspecto económico, favoreció el libre comercio, redactó un nuevo reglamento para la actividad comercial, ordenó la apertura de puertos como Maldonado y La Ensenada, persiguió el contrabando y protegió la industria minera.
2 comentarios:
Muy buen relato linda historia
Me parece interesante!
Un saludo hasta pronto.
Un saludo de paz
gracias por tus saludos
tu blog es también interesante , ya lo recorreré con tiempo
para dejar saludos en el mío tienes el libro de visitas que está debajo de la cabecera del blog
y para los comentarios a pie de cada entrada o post igual que en el tuyo:=)
espero volver a leerte por allá
que tengas un excelente día
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